Después de que todos los bisontes machos desaparecieran en el Parque Nacional Zalissia durante la invasión rusa, WWF ha lanzado una campaña para trasladar dos toros bisontes y salvar a la manada de la extinción.
La guerra entre Ucrania y Rusia ha amenazado a la población de bisontes europeos con la extinción. Un parque nacional cerca de Kiev se enfrenta a la difícil tarea de encontrar parejas para la manada compuesta únicamente por hembras en peligro de extinción. Una campaña de búsqueda de parejas por parte de un grupo de conservación de vida silvestre puede ser la única forma de proteger a la especie.
El bisonte europeo, también conocido como bisonte europeo, es uno de los mamíferos grandes más amenazados del mundo y es protegido a nivel europeo.
La especie desempeña un papel ecológico crucial en la conservación de áreas boscosas y paisajes necesarios para la supervivencia de la biodiversidad y la resistencia al cambio climático. Los bisontes ayudan a mantener corredores ecológicos, facilitando la migración de especies como el oso pardo, el lobo, el lince, entre otros.
La caza descontrolada y excesiva había llevado al bisonte europeo al borde de la extinción entre los siglos XVII y XIX en países europeos, incluida Ucrania. Sin embargo, los esfuerzos rigurosos de conservación han ayudado a recuperar lentamente la población perdida en paisajes forestales naturales.
Había 21 bisontes adultos en el Parque Nacional Zalissia, Ucrania, cuando comenzó la invasión a gran escala de Rusia en febrero de 2022, según WWF Europa Central y Oriental.
El parque nacional, al norte de Kiev, se vio directamente afectado por la guerra, y la región se convirtió en un área de intensos combates durante los primeros meses. Esto ha tenido un impacto directo en la población de bisontes europeos, ya que ningún macho ha sobrevivido en el parque nacional desde entonces.
En la actualidad, encontrar un macho para la manada compuesta únicamente por hembras es crucial para la supervivencia de la población. Sin un toro, la manada de Zalissia está condenada a la extinción.
La organización ha iniciado una campaña de donaciones llamada «300 km para amar y salvar a los bisontes» para cubrir los costos de trasladar a los dos machos.
El territorio del parque está siendo despejado y desminado, y los conservacionistas trabajan para restaurar la población de bisontes.
Los expertos han señalado que la recuperación de la manada dependerá por completo del éxito reproductivo de los machos trasladados.
Translocar a los dos bisontes machos es la única esperanza para revivir la población perdida. ¡Ayúdanos a hacerlo posible!