Advertencia de contenido: este artículo contiene acoso, agresión física y sexual.
El problema antártico comenzó en Boston, Estados Unidos, en agosto de 1999, cuando la geóloga Jane Willenbring, de 22 años, llegó para iniciar una maestría en Ciencias de la Tierra en la Universidad de Boston. Durante su investigación en la Antártida, experimentó situaciones incómodas con su mentor, el renombrado geólogo David Marchant. Más tarde, se reveló que el acoso y la agresión sexual eran comunes entre las mujeres en las estaciones de investigación de la Antártida.
A raíz de estos eventos, la Dra. Stephanie Ordóñez, una científica mexicana, se une a un grupo de mujeres líderes en STEMM para investigar estrategias contra el cambio climático en la Antártida. El camino hacia la justicia y la equidad en la investigación científica sigue siendo un desafío, pero mujeres como Ordóñez y Willenbring continúan luchando por un cambio significativo en la comunidad científica.
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