Según la profesora Jacqueline McGlade, directora ejecutiva de la AEMA, las emisiones de contaminantes del transporte disminuyeron en 2009 debido a la caída de la demanda, pero se necesitará una transformación más profunda del sistema de transporte en Europa para evitar que las emisiones aumenten incluso en tiempos de crecimiento económico.
El informe de la AEMA destaca una mayor eficiencia en el transporte, como el hecho de que en 2010 los vehículos nuevos eran aproximadamente un 20% más eficientes que en 2000. Sin embargo, estas mejoras se vieron contrarrestadas por un incremento en la demanda, lo que provocó un aumento del 27% en las emisiones de gases de efecto invernadero entre 1990 y 2009.
Los nuevos objetivos de la Comisión proporcionarán un marco para abordar los problemas medioambientales relacionados con el transporte a nivel europeo, nacional y municipal, incluyendo la calidad del aire y el cambio climático.
El informe de la AEMA incluye un escenario de referencia para evaluar el progreso hacia los objetivos medioambientales en el sector del transporte, abarcando emisiones de gases de efecto invernadero, consumo de energía y ruido, con 12 indicadores en total.
Algunas conclusiones clave del informe incluyen que el transporte representó el 24% de las emisiones de gases de efecto invernadero de la UE en 2009 y que el consumo de energía ligado al transporte ha aumentado, a pesar de una ligera disminución entre 2007 y 2009. Además, se destacan problemas con la calidad del aire, el ruido y la fragmentación del paisaje en Europa debido a carreteras, ferrocarriles y autopistas.
El informe anual de la AEMA forma parte del Mecanismo de Información sobre Transporte y Medio Ambiente (TERM) y ofrece una visión detallada sobre la situación del transporte en relación con el medio ambiente en Europa.