La provincia de Almería es conocida como el «huerto de Europa», ya que produce más de 3,5 millones de toneladas de frutas y hortalizas al año, generando ingresos cercanos a los 3.000 millones de euros. Sin embargo, a pesar de la importancia económica de este sector, más de 40.000 trabajadores llevan nueve años sin un convenio colectivo, lo cual es inaudito en el resto de España. Los sindicatos han intentado llegar a un acuerdo con la patronal para mejorar las condiciones laborales y salariales, pero las negociaciones han sido difíciles.

La mediación de la Junta de Andalucía ha sido rechazada por la patronal, lo que contrasta con otras provincias como Granada, donde se llegó a un acuerdo después de cuatro años de estancamiento. En Almería, la situación laboral en el sector hortofrutícola se ha mantenido igual desde 2013, a pesar de los altos márgenes de beneficio y el aumento de la producción y exportaciones. Los sindicatos consideran que los empresarios se niegan a negociar mejoras para sus empleados, incluso después de la subida del Salario Mínimo Interprofesional.

El secretario provincial de CCOO destaca la necesidad de mejorar las condiciones de los trabajadores para que puedan trabajar con dignidad y regularizar a aquellos en situación irregular en España. A pesar de las dificultades, algunas organizaciones empresariales han mostrado su rechazo al aumento del SMI, argumentando un impacto negativo en los costos laborales. En contraste, se espera que un nuevo acuerdo para el sector agrícola en Almería esté cerca, aunque las negociaciones continúan siendo un desafío debido a las diferencias entre las partes involucradas.