MADRID, 18 de enero.

La vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, se ha ofrecido a caminar con el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, para abordar la tala de árboles en la capital española.

«A ver si podemos ir a la plaza de Santa Ana con árboles que no se tocan, al Paseo del Prado o si lo prefiere al Wanda Metropolitano (actualmente Cívitas Metropolitano), no tengo problema. En hablar, la gente se entiende», afirmó. Este jueves la ministra en una entrevista en ‘Al Rojo Vivo’, recogida por Europa Press.

La responsable de Transición Ecológica y Reto Demográfico considera que «lo que la gente necesita es ver a las administraciones trabajando y resolviendo problemas y no insultándose ni provocándose entre sí» como ocurre, a su juicio, «en demasiadas ocasiones».

Ribera envió una carta a Almeida en la que instaba al alcalde de Madrid a detener la tala de árboles por «quebrantar la tutela y protección del patrimonio cultural de la ciudad y tener consecuencias negativas ante los efectos del cambio climático para el bienestar». de los ciudadanos.».

La tala de árboles en la ciudad de Madrid es un tema que tiene a la ministra «muy molesta» ya que, en sus palabras, los árboles «son imprescindibles» en los entornos urbanos y «no es posible sustituir un árbol maduro con dificultad para ser trasplantado». por árboles pequeños y jóvenes», algo que resulta «especialmente dramático» en zonas donde es difícil garantizar un crecimiento rápido de estos árboles.

Para la vicepresidenta tercera del Gobierno, la «gran polémica» fue que el Ayuntamiento de Madrid «prefirió talar una arboleda madura antes que cortar la circulación al tráfico en una calle lateral durante un año», por lo que ha Pidió a Almeida que explique si existen o no alternativas a esta tala de árboles.

Respecto a las declaraciones del dirigente madrileño sobre la sensibilidad de la ministra ante los árboles talados por el Ayuntamiento pero no por los talados por el Gobierno en Madrid, Ribera ha apuntado que le ha transmitido al alcalde que «no tiene ningún problema en hablar de todo porque «Intenta analizar si existen alternativas o no y motivar por qué se hacen o no».

«Me gustaría sentarme con él para valorar si necesitamos una normativa básica para la protección del arbolado urbano», concluyó el ministro.