SEO/BirdLife ha colocado nuevamente contenedores en las playas para recolectar y evaluar la basura marina con el fin de crear conciencia en la población y, al mismo tiempo, evaluar el impacto que estos desechos tienen en las aves costeras, según informa la organización.
Esta acción, dentro del proyecto ‘Life SeaBiL’, se ha llevado a cabo en el Parque Natural de las Marismas de Santoña, Victoria y Joyel, en la Reserva de la Biosfera de Urdaibai (Vizcaya) y en el Parque Natural Cabo de Cabo de Gata-Níjar, en las playas de Arco y Embarcadero, donde se han preparado contenedores de madera de 1×1 metros para depositar los objetos arrastrados por la marea.
El técnico de SEO/BirdLife en Cantabria, Ludovico de Vega, señala que los restos suelen ser cuerdas, redes y elementos plásticos en diferentes formas y tamaños, aunque no se descarta la aparición de ocasiones más improbables, como neumáticos o electrodomésticos. Además, cada dos semanas se revisa su contenido para obtener información sobre el tipo de basura más común y conocer su origen.
De Vega también enfatiza que los contenedores «no son para depositar basura y/o elementos no naturales que arrastra el mar». «Cabe recalcar que la temporada pasada, gran parte de los residuos acumulados en los contenedores eran basura común que no fue arrastrada por la marea. Este hecho dificulta la gestión y manipulación de los contenedores, así como el correcto desarrollo del proyecto», advierte De Vega.
Anteriormente, de los 163 kilogramos (kg) de basura recolectados en los sitios piloto en los que está trabajando SEO/BirdLife, 70 kg eran basura marina y los 93 kg restantes eran basura común.
Además, los contenedores no son adecuados para depositar pellet, y la entidad advierte que deben ser llevados a un gestor de residuos autorizado, enfatizando la importancia de hacerlo en coordinación con las administraciones locales, responsables de la gestión de residuos.
Aunque los contenedores no están instalados permanentemente en las playas, sino que se instalan entre octubre y marzo, SEO/BirdLife asegura que este período es «cuando más tormentas ocurren en el océano y es cuando más basura aparece en las playas». De esta manera, evitan las épocas de mayor afluencia de turismo para que los contenedores no se utilicen incorrectamente.