Esta semana se está celebrando en París la segunda sesión del Comité de Negociación Intergubernamental (CIN-2) de la ONU sobre la contaminación plástica. Durante esta semana, gobiernos, organizaciones ambientales y empresas han viajado a la capital francesa con el objetivo de llegar a un acuerdo global para abordar este grave problema. En total, hay 2,800 participantes, incluyendo 900 delegados gubernamentales de 175 países, 1,700 miembros de ONG ambientales y 200 representantes de sindicatos y organizaciones empresariales. La rápida aceleración de la contaminación plástica ha sido identificada como uno de los problemas ambientales más graves a nivel mundial, con impactos negativos en todos los aspectos, como el ecológico, económico, social y de salud. La contaminación plástica se ha convertido en la principal causa de pérdida de biodiversidad en los ecosistemas terrestres y marinos. En la sede de la UNESCO en París se está llevando a cabo esta cumbre sobre la contaminación plástica. Según la ONU, si no se toman medidas urgentes y efectivas, la cantidad de residuos plásticos en los océanos podría triplicarse en los próximos años, pasando de 14 millones de toneladas anuales en 2016 a una proyección de hasta 37 millones de toneladas por año antes de 2040. La contaminación plástica afecta la vida marina y se ha convertido en una crisis global que requiere una acción coordinada y rápida. Se estima que de las 9.2 mil millones de toneladas de plástico producidas entre 1950 y 2017, alrededor de 7 billones se han convertido en residuos plásticos. Sin embargo, se cree que la contaminación plástica podría reducirse en un 80% si se implementan cambios profundos a nivel legislativo e industrial para promover una economía circular del plástico. El Presidente Macron ha apelado a la responsabilidad de todos para abordar este problema y ha señalado la necesidad de terminar con el modelo insostenible de producción y consumo de plástico. Desde la ONU se insta a repensar los procesos de fabricación y consumo de plástico, promoviendo una economía circular y eliminando el uso de plásticos de un solo uso. Esta reunión en París es parte de un proceso que comenzó en febrero de 2022 con la adopción de una resolución histórica para reducir la contaminación por plásticos, especialmente en los océanos. Según un informe reciente de la ONU, los plásticos representan al menos el 85% de los residuos que llegan al mar y se proponen medidas como la retirada de subsidios a los combustibles fósiles, la prohibición de plásticos difíciles de reciclar y la promoción de la economía circular del plástico. Se busca un cambio sistémico en los procesos de producción, distribución y consumo para resolver las causas fundamentales de la contaminación plástica y promover la reutilización de este material.