Durante mucho tiempo, la litosfera oceánica ha intrigado a los científicos debido a su comportamiento peculiar. Esta capa se desliza sobre la astenosfera, una región más débil caracterizada por alta atenuación sísmica y baja velocidad de onda de corte. La astenosfera tiene propiedades físicas diferentes a la litosfera, como menor viscosidad, lo que resulta en un límite definido llamado límite litosfera-astenosfera (LAB). Se desconocen las razones exactas detrás de estas propiedades y cómo permiten el movimiento de la litosfera sobre la astenosfera.
Un equipo de investigadores liderado por el profesor Takashi Yoshino del Instituto de Materiales Planetarios de la Universidad de Okayama en Japón ha examinado la influencia del agua en las propiedades sísmicas de rocas de olivino sin titanio, similares a las de la astenosfera. Su estudio fue publicado en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences el 31 de julio de 2023.
Los experimentos revelaron que la presencia de agua afecta la atenuación de las ondas sísmicas, reduciendo la velocidad de las mismas. La presencia de agua también debilita la astenosfera, permitiendo el movimiento suave de la litosfera sobre ella.
Estas observaciones sugieren que la astenosfera oceánica contiene agua, lo cual podría explicar las caídas de velocidad y la atenuación observadas en esa región.
El profesor Yoshino destaca la importancia de su estudio, ya que la presencia de agua en la astenosfera puede proporcionar información valiosa sobre actividades volcánicas y sísmicas, facilitando su predicción y detección.
En resumen, este estudio contribuye a nuestra comprensión del movimiento de las placas tectónicas, lo que podría llevar a una mejor comprensión de diversas actividades tectónicas.