La primera ‘energía milagro’ ha sido descubierta tras la fusión de nitrógeno con un gas tóxico conocido por todos. La importancia de la transición energética está en aumento debido a la crisis climática que enfrentamos como sociedad y planeta. Medidas como la aprobación por parte del Parlamento Vasco de la Ley de Transición Energética y Cambio Climático de Euskadi están siendo adoptadas para combatir la contaminación.
Según informes de la ONU, es urgente limitar el aumento de la temperatura a menos de 1,5ºC para evitar impactos climáticos severos y mantener un clima habitable. Esto requiere la eliminación de millones de toneladas de gases de efecto invernadero.
Para lograr esta transformación global, es necesario cambiar la forma en la que entendemos, transportamos y consumimos energía, incluyendo el uso de nuevas formas de energía más respetuosas con el medio ambiente.
La fusión de nitrógeno con un gas tóxico sorprende al mundo
La Universidad de Wisconsin-Madison en Estados Unidos ha descubierto una nueva forma de crear energía ambientalmente responsable a partir de la fusión de nitrógeno con un gas tóxico. Este nuevo sistema se basa en las interconversiones de nitrógeno y amoníaco.
Los científicos han encontrado que la adición de amoníaco a un catalizador metálico con rutenio produce nitrógeno de forma espontánea, sin necesidad de energía adicional. Este hallazgo podría ser clave para reemplazar los combustibles a base de carbono y avanzar hacia un mundo carbono neutral para 2050, como propone la ONU.
Descubrimiento revolucionario en el sector energético
Los expertos están entusiasmados con la posibilidad de generar nitrógeno a partir de amoníaco sin necesidad de energía adicional. Este proceso también se ha demostrado útil para la producción de electricidad, con subproductos de protones y gas nitrógeno. Además, el complejo metálico utilizado en el proceso puede reciclarse y reutilizarse de manera más limpia que los combustibles a base de carbono.
El grupo de investigación continuará trabajando en este proyecto, explorando formas de diseñar una pila de combustible para aprovechar esta nueva fuente de energía. El objetivo es poder generar amoníaco a partir de agua, en lugar de gas hidrógeno, utilizando luz solar, agua y aire.
En resumen, la fusión de nitrógeno con este gas tóxico ha dado origen a la primera ‘energía milagro’, un avance energético con un gran potencial de desarrollo. Este descubrimiento representa un paso adelante hacia un futuro más sostenible y respetuoso con el medio ambiente.