Cuando quedaban 48 horas para que finalizara la COP28, el Secretario General de la ONU envió un mensaje claro a los negociadores gubernamentales, instándolos a concluir la conferencia con un resultado ambicioso que demuestre una acción decisiva y un plan creíble para mantener vivo el objetivo de limitar el calentamiento global a 1,5 grados. Mencionó la importancia de cerrar la brecha en las negociaciones y de actuar con máxima ambición y flexibilidad.

En cuanto a las negociaciones sobre un documento final, se destacó la importancia de las finanzas como base para ampliar la acción climática. Se enfatizó la necesidad de ser flexibles y ambiciosos en términos de mitigación, y de respaldar esta transición con los medios de apoyo adecuados.

El presidente de la COP28 resaltó la importancia de alcanzar un acuerdo sobre el texto final y de mantener vivo el objetivo de limitar el calentamiento global a 1,5 grados. Se mencionó la necesidad de una mayor ambición en todos los temas, incluido el lenguaje sobre combustibles fósiles.

El llamado Balance Global, que se está evaluando, podría allanar el camino para planes nacionales de acción climática ambiciosos. Se subrayó la importancia de eliminar gradualmente los combustibles fósiles y acelerar una transición energética justa y ordenada para todos.

El Secretario General destacó la importancia de intensificar la acción climática en términos de transformación energética, justicia climática y un nuevo marco de adaptación. Hizo hincapié en la necesidad de cumplir los compromisos asumidos en materia de financiación y adaptación, así como en la importancia de asignar al menos la mitad de todo el financiamiento climático a la adaptación.

Finalmente, el Secretario General instó a los negociadores a estar a la altura de la escala y la urgencia del desafío climático.