Los tribunales de California han frustrado el intento de adueñarse del agua por parte del Distrito de Agua de Westlands, oponiéndose a su plan y rechazando su propuesta de contrato.
A pesar de las deficiencias en las leyes y políticas del agua en California, el fracaso de Westlands es una noticia alentadora para terminar el año.
El distrito, conocido por su influencia en el Valle de San Joaquín, intentó asegurar un suministro permanente de agua del gobierno federal para sus actividades agrícolas, lo que lo convertiría en el principal usuario de agua a expensas de otros intereses.
Sin embargo, sus esfuerzos se vieron frustrados por una coalición de grupos que se unieron en oposición a su plan.
A pesar de un intento de obtener la aprobación legal, la acción de Westlands fue rechazada por tribunales estatales y de apelación, lo que pone fin a su intento de privatización del agua estilo Grinch.
Esto representa una victoria significativa para los grupos locales, tribales, ambientales y para el gobierno federal.
Aunque Westlands afirma haber asegurado un contrato permanente de suministro de agua, los fallos judiciales demuestran que este contrato no tiene validez.
Sería prudente para la Administración Biden anular este contrato en base a los fallos judiciales.